# Piensa dos veces antes de actuar.

 Llegaste de la nada, sin permiso, sin llamar y fuiste el único capaz de estabilizar todo en mi y a la misma vez de desestabilizar mis cimientos. Pero según tú no fue tu culpa, de lo único que hiciste bien es en irte a la primera de cambio total no había nada que te importara aparte de tu gran ego, sin importarte los recuerdos que pudieras dejar o los daños que pudieras hacer. Y aun así  dejastes mis sonrisas colgando del filo de mis labios, aún sigo esperándote como si nada de esto hubiera pasado y que traigas contigo una reconciliación que me haga olvidar. Siempre me dijiste que no fuera rencorosa, que eso no era de niñas buenas y me pregunto que ¿como tendría que ser contigo?. Pero hay algo que deseo más que tu reconciliación, algo que me haga olvidar, que cierren todas esas heridas que tras tu marcha dejastes abiertas y aún no saben como cicatrizar.