Y llega un día, donde entre toda esa oscuridad ves un
rallito de luz, puede ser que de esperanza o de fe, que cuando te vas acercando
a él poco a poco empieza a crecer, y ves que donde todo eran tardes de lluvia,
de estar tumbada en tu cama y siendo pesimista ante todo, te das cuenta de que
por una vez después de tanto tiempo pueden cambiar las cosas y en este caso
para mejor, y que gracias a eso vas a poder dejar todo lo que te hace daño de
una vez por todas atrás y te darás cuenta de que las cosas no son como las veías
sino como tu te sentías. Pues bien, aprovecha esa oportunidad que se te
presenta, que puedes volver a esos días en lo que esa cabecita loca tuya vuelve
a brillar y en donde lo único que eras capaz de hacer era sonreír como esa
chica tonta enamorada que eras pero de la persona correcta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario